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 La dislexia es un trastorno que consiste en la dificultad para leer o escribir. Este problema de aprendizaje se debe a una alteración de las zonas cerebrales que controlan el lenguaje y afecta a un 5% de los niños entre 7 a 9 años, sobre todo a los varones. En algunos casos se ha observado que hay diferencia en el tamaño de los hemisferios cerebrales, principalmente en el izquierdo, el cual es el encargado de asociar los sonidos con la imagen de las letras, es por eso que se les dificulta deletrear, escribir o hablar. Otra causa posible sería de tipo genético ya que el cerebro de los niños con dislexia procesan las palabras diferente a la de los niños sin este problema. El cerebro humano está formado por dos hemisferios o mitades: El
derecho y el izquierdo, los cuales se comunican entre sí. La forma en que trabaja cada hemisferio también es distinta; es así que el hemisferio izquierdo procesa cierta información primero, luego otra, mientras que el derecho procesa muchos datos a la vez. Cuando leemos se combinan los dos tipos de procesos (secuencial y simultáneo) en el manejo de la información, en cambio quien tiene dislexia en el hemisferio izquierdo hay un fallo por lo que se ve afectada la velocidad en que se procesa la información, así que no se pueden procesar cambios rápidos de estímulos o sucesiones, tanto en el área visual como auditiva. Saber exactamente donde se encuentra la falla es muy difícil, sin embargo recientes estudios indican que se encuentra entre el lenguaje hablado y el escrito. Por otro lado se ha se ha considerado que los conflictos psíquicos provocados por las presiones y tensiones del ambiente en que se desenvuelve el niño, también pueden ser factores que desencadenen este problema. Fuentes: |
