Según datos de la organización Mundial de la Salud, se estima que dos mil millones de niños y adolescentes en el mundo tienen sobrepeso u obesidad.
Varias son las causas que provocan obesidad en los niños, éstas pueden ser biológicas, por alguna enfermedad y por cuestiones socioeconómicas y culturales; sin embargo las más recurrentes son la mala alimentación y la falta de ejercicio.
La obesidad infantil aumenta el riesgo de desarrollar enfermedades crónicas como la diabetes mellitus.
Un niño con este problema habitualmente viene de un núcleo familiar obeso, por lo tanto, nunca debe atenderse al niño de manera aislada, sino considerando a la familia.
Los adultos somos absolutamente responsables de que los niños de hoy no sean obesos en un futuro.
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